Definen arranque regional de servicios en computación avanzada

Luego de dos días de trabajo en la ciudad de Bucaramanga, representantes de redes nacionales de Investigación y Educación de América Latina, junto a RedCLARA y distintos centros de investigación suscribieron la intención de continuar colaborando en la construcción de los servicios de cómputo avanzado, en los que se hará énfasis no sólo en proveer herramientas para la e-investigación, sino también en estimular iniciativas que incidan en la docencia universitaria y generen impacto social en la región.

Al encuentro asistieron representantes de las redes nacionales de Colombia (RENATA), Costa Rica (RedCONARE), Ecuador (CEDIA) y México (CUDI), países que suscribieron a mediados del año pasado el acuerdo regional para dar continuidad a la operación de la e-Infraestructura en América Latina con el fin de poner a disposición de la investigación y la educación los recursos de cómputo avanzado en beneficio de la e-Ciencia. Igualmente, INNOVA-Red, país que también forma parte de este acuerdo, realizó seguimiento virtual a la reunión técnica de Bucaramanga y manifestó su adhesión a los acuerdos que se generaron para consolidar los Servicios de Computación Avanzada en América Latina (SCALAC).

 

Como se sabe, la región cuenta con seis años de experiencia en proyectos que activaron la tecnología Grid en cooperación con Europa. El proyecto más reciente culminado el año pasado (GISELA) devino en un modelo de sostenibilidad para los servicios de computación avanzada soportado en las capacidades instaladas en la región, que permitiera aprovechar los avances y ritmos de cada país en esta experiencia, con un esquema de trabajo que garantizara a mediano plazo la consolidación de la e-infraestructura para aumentar la capacidad de almacenamiento y procesamiento de datos en diversas áreas del conocimiento.

 

La reunión de Bucaramanga buscó delinear algunas estrategias de cooperación en Computación Avanzada entre Europa y América Latina, por lo que se contó con la participación del Centro Nacional de Supercomputación de Barcelona y el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas de España. Igualmente formaron parte del equipo de trabajo que ya integran la capacidad instalada en la región: la Universidad Industrial de Santander, la Universidad Nacional y la Universidad de Los Andes de Colombia; el Centro Nacional de Alta Tecnología de Costa Rica; la Universidad San Francisco de Quito (Ecuador); la Universidad Nacional Autónoma de México; la Universidad de Los Andes de Venezuela; y el Sistema Nacional de Procesamiento de Alto Desempeño de Brasil. Igualmente se contó con la participación de un representante de la agrupación para el manejo de políticas de seguridad en Grid, TAPGMA.

 

Los centros de investigación de la región se comprometieron a definir las aplicaciones que estén siendo usadas por los investigadores, o aquellas que se consideren de impacto social para ponerlas a disposición en la infraestructura y servicios regionales, además de aportar personal técnico para las adaptaciones pertinentes.

SCALAC